La apicultura es la ciencia y técnica que se dedica al estudio y a la cría de las abejas con el objeto de brindarles los cuidados y recursos necesarios para obtener y aprovechar los productos que estas producen como: miel, cera, polen o jalea real, entre otros. Si te gusta mezclar el dulce con el sexo, nada como el porno italiano.
Las abejas son insectos muy sociables, por lo que suelen vivir en grupo en la colmena. En una colmena de abejas podemos encontrar tres tipos de estas: abeja reina, abeja obrera y zángano.
Un sistema jerárquico y bien ordenado
La abeja reina es la líder de la colmena, su papel es el de poner huevos de los que sale el resto de habitantes de la colmena. Físicamente se diferencia de la abeja obrera por su abdomen alargado, sus alas más cortas y que su tamaño general es mayor. Otra de sus responsabilidades trata de segregar una feromona que mantiene unidos a todos los habitantes de la colmena, con la edad va perdiendo paulatinamente el poder de producir dicha hormona. Aunque en la colmena conviven de miles de hembras, tan solo la reina desarrolla en totalidad sus órganos sexuales y esto se debe a la presencia de ciertas sustancias químicas que son secretadas por la soberana.
Las abejas obreras recogen el néctar procedente de las flores, Las abejas lo recogen, transforman y combinan con la enzima invertasa que contiene la saliva de las abejas y lo almacenan en los panales donde madura sellando la celda con una fina capa de cera. Esta parte del proceso se denomina el operculado de las celdas y es la señal que interpretan los apicultores para saber cuando la miel está lista para ser recogida de las colmenas.
Las abejas producen el triple de miel de la que necesitan para consumir, por eso el mercado de la apicultura es bien sostenible. Como se ha visto el proceso de elaboración de la miel es bien complejo, sobre todo si se tiene en cuenta que todo el proceso está a cargo de unos diminutos insectos y que el resultado es un alimento muy rico en nutrientes y antioxidantes.
Principales propiedades de la miel
- Reguladora del transito intestinal.
- Previene ulceras de estomago.
- Un buen edulcorante natural y mejor alternativa que el azúcar.
- Aporta mucha energía.
- Mejora el sistema respiratorio y alivia catarros.
- Cicatriza heridas externas.
- Como cosmético tiene un gran poder hidratante y es buena para combatir el acné.
Además se le atribuyen diferentes propiedades terapéuticas: antiséptico, fortificante, calmante, laxante, diurético y bactericida. En definitiva, un gran alimento que no solo sirve para endulzarte la vida, sino que tiene una serie de propiedades beneficiosas para el cuerpo humano que no puedes dejar escapar. Y estarás dando las gracias a unos insectos superinteligentes.